El movimiento #MeToo expone los acosos sexuales en la industria del entretenimiento en Corea del Sur

A lo largo de los años hemos sido testigos de los numerosos movimientos y causas sociales en contra del abuso sexual, principalmente a la mujer. Pero pareciera que en Corea del Su ha llegado un poco tarde. De acuerdo a datos del Foro Económico Mundial en 2014, el país se posicionó en el número 117 de 142 en igualdad de género, un número bastante bajo para un país que se ha comenzado a catalogar como primer mundo.

"La violencia de género es un problema donde la estructura social permite que los poderosos opriman sexualmente o ejerzan violencia contra los débiles," comentó el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, en relación al movimiento que actualmente está ganando gran popularidad en el país, "Aplaudo a los que tuvieron el valor de contar sus historias." Pero ante todo ¿cómo empezó?

¿Cuándo fue que surgió este movimiento?

Fue en 2006 cuando fue utilizada la frase #MeToo por primera vez a través de Myspace por la activista social Tarana Burke pero no fue hasta 2017 cuando se popularizó gracias a la actriz Alyssa Milano y a decenas de mujeres que acusaron al productor cinematográfico estadounidense Harvey Weinstein por mala conducta sexual, incluida la violación. Esto desencadenó, no solo un escándalo en Hollywood, sino un malestar que se ha extendido en todo el mundo.

Desde ese momento y hasta ahora el mensaje se ha ido popularizando a través del mundo, llegando a diversos países incluyendo México, y más recientemente: Corea del Sur.

El pasado enero fue cuando el movimiento cobró fuerza en el país asiático, exactamente cuando Seo Ji-hyeon (fiscal público) hizo pública su acusación de que un ex funcionario del Ministerio de Justicia de Corea del Sur la había manoseado durante un funeral en el año 2010, no obstante el acusado mencionó que no recordaba el incidente.

Seo apareció en televisión para contar su historia, bastó eso para mover masas e incitar a la gente a apoyar el movimiento y hacer la diferencia. Hoy en día el movimiento ha avanzado mucho más de lo que se esperaba, pero aún falta mucho qué hacer.

El movimiento ha abarcado diversos ámbitos, desde políticos hasta el medio artístico. Empezando en 2015, cuando dentro de la industria del cine coreano comenzaba a emerger a la luz el movimiento, esto debido a las acusaciones de una ex alumna de la Academia de Artes Cinematográficas en Corea en contra de la directora de cine Lee Hyun-ju (conocida por el drama lésbico Our Love Story), quien al final se disculpó y terminó retirándose de la industria.

En casos más recientes, está el del director artístico de uno de los principales grupos teatrales de Corea del Sur, Lee Yoon-taek, se disculpó públicamente por acosar a las actrices jóvenes, pero negó la acusación de violación.

También el actor y profesor universitario, Cho Min-Ki, renunció a su puesto de docente y dejó un papel en una serie de televisión después de enfrentar acusaciones de acoso hacia sus alumnas, actualmente enfrenta una investigación policial.

El actor Cho Jae-Hyun (conocido por la película 'Bad Guy') emitió una declaración el sábado pasado disculpándose por sus malas acciones luego de que se hicieran públicas las acusaciones de acoso sexual contra él. 

El comediante Oh Dal-su emitió un comunicado negándose a las acusaciones de acoso hacia la actriz Uhm Ji Young en la década de 1990, pero días después lanzó un nuevo comunicado admitiendo dichas acusaciones.

La semana pasada el rapero Don Malik (Moon In-sub) fue acusado de acosar sexualmente a una fan menor de edad. Su agencia lo confirmó y actuó inmediatamente expulsándolo de la misma. 

Incluso, en el ámbito religioso hubo quien se disculpó, la Diócesis Católica de Suwon suspendió a un sacerdote mayor el pasado viernes por supuesto abuso contra un feligrés durante una misión en Sudán del Sur en 2011.

Y así la lista continua, lo sorprendente de este movimiento es que no solo se encuentra a nivel mundial, Suk-Young Kim, un profesor de la Universidad de California, considera que  no es solo un movimiento de mujeres. "Corea no tiene el tipo de tensión racial que se ve en Estados Unidos, pero existe un tipo de división de clases que afecta de manera gradual. Esta noción se encuentra muy presente en todos, especialmente en los más desfavorecidos, y son ellos y los jóvenes de hoy en día que ven #MeToo como una extensión de su lucha." 

Es un acto de solidaridad, acorde al profesor Kim, pero esta solidaridad se ve reflejada en contra de la opresión, mayormente masculina, de una figura poderosa (jefe o padre).

Para que te des una idea de lo importante que ha sido este movimiento, el año pasado Amber de f(x), habló respecto al tema en sus redes sociales, expresando que tanto ella como sus seres queridos habían experimentado y sufrido acoso sexual. Su publicación escaló grandes números de visitas, pero no solo eso, dio paso a insinuar un lado mucho más oscuro de la industria del K-Pop, donde es gracias a los "patrocinios" en que las estrellas se involucran con patrocinadores adinerados, entrando así en el mundo de prostitución. 

Un claro ejemplo es el de la cantante G.Na (Gina Choi), donde su carrera se detuvo abruptamente en 2016 después de haber recibido cargos de prostitución. La historia de G.Na resulta interesante y curiosa a la vez, porque muestra como una artista puede ser engañada y llevada hasta ese punto. 

El feminismo en Corea del Sur


De acuerdo al profesor Kim, el feminismo en Corea es un movimiento relativamente nuevo y tomando en cuenta la cultura conservadora del país, no forma parte del discurso público, esto debido a que las normas patriarcales son desenfrenadas en Corea del Sur.

Para poner un ejemplo, solo hace falta recordar el incidente ocurrido recientemente de la cantante Naeun de Apink, quien fue duramente criticada por llevar una imagen en su teléfono que decía "Las chicas pueden hacer cualquier cosa". 

Pero si esperamos que el movimiento feminista tenga éxito en un país tan conservador como Corea del Sur, desde ahora está bastante claro que no será pronto, sobre todo cuando aún manifestando que se es víctima del acoso causa repercusión en el status quo de las personas. 

El ser víctima y expresarlo trae consigo un sentimiento de culpa y vergüenza, por ello muchas personas hacen uso de aplicaciones anónimas como Blind para lanzar sus acusaciones. 

Finalmente aun hay mucho trabajo por hacer y un largo camino por recorrer, sobre todo en países conservadores como lo es Corea del Sur. Los primeros pasos se han dado (exponer los casos), y se está instando a las autoridades a investigar más a fondo estos casos y no dejarlos pasar, pero finalmente el cambio verdadero lo realizará la sociedad, la verdadera pregunta es ¿cuál será el siguiente paso para lograrlo?

Fuentes:

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